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martes, 3 de febrero de 2009

Pitoniso M.D.

[to black Senator] You're not going to become President either way. They don't call it the White House because of the paint job.

-- Dr. Gregory House, "House S01E17"

Menos mal que el hombre no tiene que ganarse el suelo trabajando de pitoniso... Bueno, como si acertar importara... XD

martes, 2 de septiembre de 2008

The Wire

Hace un par de semanas que terminé de ver la quinta y última temporada de esta serie, y aunque normalmente tanto tiempo después ni me molestaría en escribir algo al respecto, la verdad es que de esta serie en concreto tenía ganas de escribir una entrada. ¿Y por qué? Sencillamente por que me parece una de las series más fabulosas que he visto.

The Wire (“Bajo escuha”, creo que la han titulado por estos lares) empieza como una serie de policías un tanto diferente. No va al típico acelerado ritmo que suele ser normal en las series, a un caso por capítulo, quizá dos en los casos muy especiales. Toda la primera temporada es un único, largo, caso. Y también es mucho más sucia. Las pruebas no aparecen como por arte de magia. Los asesinos no se derrumban y lo confiesan todo después de cinco minutos de interrogatorio. Los testigos no hablan por que sí. Los polis no son inquebrantables pilares de la comunidad, guapos, listos, incorruptibles e incansables.

Aquí las pruebas se consiguen tras largas y tediosas investigaciones, horas y horas de vigilancias en los tejados, e interminables peleas burocráticas por conseguir una orden de registro o una escucha. Los asesinos no confiesan y tienen abogados que les dan de patadas a los fiscales. Los testigos no hablan, y a los que hablan, los quitan de en medio. Los polis son una panda de vagos y borrachos que lo único que piensan es en escaquearse y ver quien le va a firmar las horas extras que no han trabajado y donde los pocos que realmente son “buenos polis” se ven ahogados en medio de la incompetencia general. En definitiva, mucho menos Hollywood y probablemente mucho más cerca de lo que puede ser en la realidad.

Y no solamente va la serie de trabajo policial. Aquí “los malos” son parte fundamental de la trama, teniendo tanto protagonismo como los polis que intentan atraparlos. Sus motivaciones, sus deseos, la dura vida en las “casas baratas”. No solamente se ve el crimen, sino las raíces del crimen.

Súmale a todo eso unos guiones fabulosos, una trama absorbente y una gran dirección y ya tienes entre manos una de las mejores series policíacas que se han filmando.

Y eso es solo la primera temporada... A partir de ahí las cosas no hacen más que mejorar...

Por que en la segunda temporada, la serie extiende sus hilos. A otras zonas de la ciudad, a la corrupción en los sindicatos, la lucha de poder en la jerarquía de la policía, al tráfico de drogas a gran escala. Y como todo ello se mezcla y relaciona el más insignificante camello vendiendo en una esquina con un concejal de urbanismo.

Y ahí no queda la cosa, por que es a partir de la tercera temporada cuando la serie se vuelve ya absolutamente grandiosa. Es a partir de esta temporada cuando prácticamente toda la ciudad se ve reflejada en la serie, desde las esquinas de los barrios hasta el despacho del alcalde. Las tramas se cruzan por todas partes. Las guerras entre bandas por el control de las calles se reflejan en las luchas entre los políticos, que se reflejan en la presión que ejercen sobre el trabajo policial. La cuarta temporada mete en el meollo al sistema educativo y finalmente la quinta, a la prensa. Todos los trapos sucios, a todos los niveles, de una gran ciudad como Baltimore reflejados de manera simplemente magistral.

No es, desde luego, una serie para “ver sin pensar” (como me definía una amiga “Sexo en Nueva York”). Solo para seguir las decenas de personajes diferentes, cada uno de ellos perfectamente definido e interpretado, las relaciones entre ellos y como van variando de situación y protagonismo en cada una de las temporadas de la serie ya tienes que prestar bastante atención. Pero en realidad da igual, por que la trama es tan absorbente y esta tan bien llevada que simplemente sigues las cosas de manera natural.

En fin, ¡que hay que verla, coño!

Que además una de las cosas que más me sorprende es que, en las típicas conversaciones de “tu que series ves”, hasta ahora nadie la conocía cuando la he mencionado. Y eso a pesar de ser una serie aclamada unánimemente por todo el mundo, incluso considerada por muchos como la mejor serie de TV de todos los tiempos, que es mucho decir, y poniéndola por delante de otros pesos pesados de HBO (que teniendo en su haber series como “Los Soprano” o “Hermanos de sangre”, también es mucho decir).

Por estos lares creo que van a emitir ahora la cuarta temporada en TNT, pero la versión doblada es un auténtico crimen. El destrozo que le hacen es considerable (¿a quién se le ocurre doblar a una banda de trapichas negratas de barrio pobre?) así que la mejor opción es eMuleTV + subtítulos, que son sencillos de conseguir.

Ya está todo el mundo bajándosela a la de YA.

sábado, 5 de abril de 2008

Tengen Toppa Gurren Lagann


Bueno, lo primero que voy a decir es que en estos momentos estoy uber-hypeado después de terminar de ver esta serie, así que no garantizo mucha objetividad al escribir esto. La verdad es que hacia muuuucho tiempo que no acababa tan hypeado al terminar de ver una serie como con Tengen Toppa Gurren Lagann.

Y la verdad es que lo primero que se me ocurre decir de esta serie es que es GAINAX en estado puro. Solo ellos serían capaces de coger un montón de topicazos, batirlos bien y crear una historia de mechas realmente original como esta (sin evitar, por supuesto, las típicas ralladas mentales). Al principio pensé que era algo así como coger lo mejor de Nadia, Gunbuster y Evangelion y mezclarlo todo bien, pero sinceramente creo que esa apreciación no le hace ninguna justicia.

Ni siquiera hace falta hablar del argumento. La historia de TTGL es épica. Y cuando digo épica, es ÉPICA. Empieza con un simple muchacho con un taladro manual en una perdida aldea subterránea y termina con grandiosas batallas espaciales con mechas del tamaño de galaxias. Una historia de lucha, superación personal, confianza, amistad, equipo, afrontar lo imposible y salir victorioso a pura fuerza de voluntad.

Toda la trama se desarrolla a una velocidad vertiginosa. Prácticamente en toda la serie no hay un solo momento de respiro. Da la impresión de que han querido ir totalmente al grano, dejando de lado cualquier relleno (quitando el episodio “recopilatorio”, muy GAINAX también) o historias paralelas. El resultado es una serie que casi no te deja relajarte ni un instante y realmente se pasa en un momento.

Los personajes son fabulosos. En ningún otro animé te encontraras semejante grupo de personalidades tan absolutamente arrolladoras, por las que es simplemente imposible no acabar arrastrado y terminar cada capítulo casi gritando eso de “Ore wo dare da to omotte yagaru!!!!”. Aunque la mitad de los personajes están hechos a base de topicazos (tienes el exaltado, la tía dura maciza fanservice, el cobardica indeciso, la inocente, el serio, etc.) no se quedan simplemente en eso durante toda la serie, sino que evolucionan, se ven afectados por los acontecimientos y por sus relaciones con los demás. En la mayoría de las series siempre te encuentras algún personaje intragable, pero en esta es que no encuentro ninguno que quitaría de en medio. Hasta los malos son geniales.

La animación es de gran calidad, como suele ser en las producciones de GAINAX, quitando algún capítulo bastante WTF. Por otro lado hay que estar preparado para los constantes cambios de estilo y diseño que también les caracterizan bastante a menudo.

La música en conjunto para mi es lo más flojo de la serie. Sin embargo tiene un par de temas que se repiten a lo largo de la serie que son de lo mejorcito en combinar historia-imagen-música. Cada vez que durante una escena especialmente memorable suena el grandioso tema principal (de título interminable) te enaltece tanto que piensas que en la vida vas a ver mejor escena que esa (Raw! Raw! Fight the power!)… hasta que ves la siguiente. Ese tema y otro que suele sonar durante las batallas es casi lo único que se salva de una BSO por otro lado normalilla.

En general y ya para acabar, esta sería, para mi, sin lugar a dudas la serie del 2007, si no fuera por Nodame Cantabile. Le doy un 8,5, conteniéndome bastante.

Ahora mi problema es encontrar una figura guapa de Yoko que no me cueste un riñón…

Do the impossible,
see the invisible.
Raw! Raw!
Fight the power!

Touch the untouchable,
break the unbreakable.
Raw! Raw!
Fight the power!


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Now playing: Iwasaki Tarou - Rap wa Kan no Tamashii da! Muri wo Toushite Douri wo Kettobasu! Ore Tachi dai Gurren Dan no Theme wo Mimi no Ana Kappo Jitte yo~ Kukiki Yagare!!
via FoxyTunes

lunes, 10 de marzo de 2008

Najica Blitz Tactics

Voy a ser breve.

Armas. Chicas. Fanservice.

Montones de fanservice.

Historia... algo tendrá... eso creo... vamos, digo yo... por ahí andará...

Creo que es la primera vez que soy incapaz de terminarme el primer capítulo de una serie (joder, hasta de "Proyecto A-ko" fui capaz de tragarme dos), pero, sinceramente, me aburrí de ver bragas. Para eso me compro el Victoria's Secret.

En fin. Perfectamente prescindible.